Este sábado. Cumpleaños. Estará él, el chico de las mil pelis. Y no sé si quiero ir, no sé si tengo ganas de mirarle a la cara y hacer como si nada. De estar rodeada de gente que aunque la conozca, no me siento yo. ¿No os pasa a veces que no sois las mismas personas delante de un grupo que de otro? Como que te cortas y es por no tener la suficiente confianza como para hacer la tonta delante de todos. O porque te da vergüenza.
Lo bueno de todo es que estará junto a mí, mi querida hermana. Esa persona a la que adoro tanto. Con la que podré comentar cualquier cosa. Poner verde al chico de las mil pelis, reírnos de todos los demás.. Porque ella siempre estará ahí para criticar a quien yo critique y apoyarme en todo lo que haga falta, a su manera, pero apoyándome. Porque ella es especial.
A lo que iba. El sábado fingiré. Fingiré que no me importas. Fingiré no verte. Fingiré con una gran sonrisa que todo el mundo se preguntará porque sonrío. Porque así me autoengaño yo, y de otras mil maneras más. Porque, ¿sabes? Voy a intentar no pasarlo mal por ti. Ni por ti, ni por nadie. Porque una gran persona a la cual yo admiro mucho dijo: "La vida es muy corta para compartirla con alguien que no sabe quererte". Y con esas valiosas palabras me quedo. ¿Sabéis quién lo dijo? La maravillosa  Ana Milán.