Tarde de chicas.

noviembre 20, 2011

- Venga, vamos ha hacer vídeos.
- Pero, ¿cuándo vais a empezar a cantar?
- Lalala
En medio de la calle con una guitarra... No sabemos tocarla ¿vale? Vamos que hacer el ridículo, para nosotras, se nos queda corto.
- Que vienen unos tíos.
- Arrea, arrea. 
- Yo quería cantarte, pero han venido éstos y no es plan. 
- Sí, sí, lo que tú digas, pero vámonos. 
En otro sitio, no muy lejos de donde estábamos, empezamos a grabar de nuevo. Vídeos, vídeos y más vídeos. Con sus respectivas risas.
- Los pajaritos. Vamos a cantar esa, y vosotras salís por detrás, así, pío, pío, pío...
- Pili, por dios.
- jajajajajajaja.
Y va pasando la tarde, las horas, y nos estamos riendo, partiéndonos el culo. Pasando una tarde de chicas. Como yo quería. No estaba planeado, es más, solo teníamos pensado ir a dar una vuelta, cenar y volver a casa tal cual. Pero ¿no dicen que las cosas que no están planeadas salen mejor? Pues eso mismo.
Hemos saltado, hemos reído, hemos hecho el ridículo, hemos dicho cosas sin sentido, hemos jugado a "hay una carta debajo de la mesa" pero a nuestra manera.
- Hay una mesa debajo de la carta.... 
- ¿Qué dices? jajajajajaja.
Y algunas tonterías más. Total, mañana no hay que madrugar.
En medio de la calle, sentadas en el suelo, saludando a la gente que pasaba con el coche, sin ningún reparo. Con la guitarra, tocando las cuerdas y "cantando". Vale, no sabemos ni cantar ni tocar la guitarra, pero ¿y lo que nos hemos reído nosotras?

You Might Also Like

1 comentarios

  1. Las cosas que no se planean siempre saldrán bien. Porque el problema está en que nuestros planes tienden a ser perfectos, y no existe nunca tal perfección.
    Una tarde de risas es muy agradable. Me alegro de que lo pasases bien :)
    Un beso.

    ResponderEliminar