Ella sabía que el 2012 iba a ser un año bueno, lo intuía. Había cerrado una etapa en su vida muy importante, había hablado con la persona a la que amaba y se habían puesto de acuerdo después de un año y cinco meses. Aunque la solución no era buena, pero ya sabía que tenía que hacer al fin. Además tenía las cosas más claras, y sabía perfectamente lo que no quería. 
Estaba esplendida. Sonrisa grande y siempre arreglada. Sentía que iba a empezar a vivir la vida, su vida, que comenzaba a ser feliz de verdad y a preocuparse por las cosas que verdaderamente le importara. Tenía que recuperar el tiempo que había perdido en su vida. El tiempo que había dejado pasar mientras esperaba a que él volviera aparecer, volviera a hacerle feliz.
Entonces me buscó. Quería que le aconsejará, que le dijera lo que yo pensaba y lo que yo haría...

Que tu chico no se preocupa por ti, déjalo hay demasiados chicos ahí fuera dispuestos a darte los mimos que necesitas y a prestarte la atención que necesitas. Que si un chico desaparece de tu vida es porque no te merece, porque tú necesitas a un hombre de verdad, que no desaparezca a la mínima de cambio. Un hombre hecho y derecho. Por eso, vive los momentos especiales como cual e intenta pasar los malos, lo más deprisa que puedas, sonríe y búscale lo bueno a todo, porque lo tiene. No seas tonta, vive la vida, sonríe y empieza el año con las ideas claras o intenta aclararte. Busca la felicidad. Tu felicidad.