Los sueños hacen lo que quieren.
junio 13, 2016
La vida pasa y tú te acostumbras a lo que tienes, unos días te acuerdas de esa persona que te miró mientras la gente pasaba alrededor vuestro y vuestras miradas se quedaron pegadas por unos largos segundos, hasta que tú agachaste la mirada avergonzada. Otros días te olvidas y te centras en los tuyos. Así va pasando los días, hasta que una noche cualquiera, te metes a la cama para finalizar el día y dejas que la imaginación, el subconsciente o yo que sé que de rienda suelta.
Y a la mañana siguiente, te despiertas y todavía en la cama te viene el sueño a la cabeza y ya lo tienes para todo el día. Te levantas y empiezas tu día, con unas cosas y con otras y con esa que todavía te ronda. Él ha vuelto a tu cabeza sin ni siquiera hacer absolutamente nada. ¡¡Maldito subconsciente!!
Los días pasan y tienes una nueva oportunidad para verle, ya sabes donde encontrarle, y lo encuentras, y tienes otra cosa más para añadir a tu historia, a vuestra historia. Y la añades, y se te queda en los pequeños cajoncitos de tu cerebro, y lo abres cuando te apetece y lo cierras cuando quieres, excepto en sueños, los sueños hacen lo que quieren.
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