Balance.
agosto 01, 2017
Últimamente solo hago que toparme con gente que quiere cambiar la forma de vida que lleva. Irse lejos de todos, estar más cerca de la naturaleza, irse a vivir a otro país, dejar de fumar, perder peso, dejar el trabajo, dejar a la pareja... Una infinidad de cosas más propio de enero que de agosto, aunque para mí, septiembre siempre ha sido un buen momento para proponerse cosas y cambiar otras. Un verdadero comienzo de todo.
Todo esto me llega en un momento un poco flojo. Estoy saturada, no me siento bien en ningún sitio, no sé donde meterme y la cabeza tiene más pensamientos que gente en los festivales de turno. Tengo claro que necesito un cambio. Un cambio de aires, de personas, de lugares, de sentimientos, en definitiva, un cambio de VIDA.
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